Esta semana, Puebla celebró el primer Festival por los Derechos de los Seres Sintientes, organizado por el Instituto de Bienestar Animal (IBA) en coordinación con la sociedad civil; cuya finalidad es el fomento al respeto, la empatía y el bienestar hacia todos los seres que forman parte del entorno.

Esta jornada se llevó a cabo en el Parque Ecológico, un espacio que por segunda ocasión fue reconocido como sitio amigable con los seres sintientes, en la que además se llevaron a cabo tres adopciones responsables, 15 empadronamientos y más de 20 revisiones médicas veterinarias gratuitas. Mientras que los participantes asistieron a los seres sintientes con una colecta de víveres y recibieron información sobre tenencia responsable, en un ambiente familiar que fortaleció la cultura del bienestar animal.

El Gobierno de Alejandro Armenta Mier, tiene un compromiso inquebrantable hacia los animales, y en cada oportunidad, el mandatario recalca que el bienestar de estos seres sintientes es una prioridad para su administración. Su empatía se refleja en las políticas que se están implementando para garantizar un trato digno a los animales, fomentando así una cultura de respeto y amor hacia ellos.

Cabe destacar la participación ciudadana y la colaboración entre sociedad civil y el gobierno estatal, quienes, además, destinaron suministros y apoyo a las familias y seres sintientes de la Sierra Norte del estado afectados por las recientes lluvias.

En el corte de listón participó Tommy Armenta, presidente honorario del Instituto de Bienestar Animal, junto con asociaciones protectoras, voluntarias, voluntarios y visitantes comprometidos con el bienestar animal. También participaron organizaciones de la sociedad civil que instalaron stands de alimentos, módulos de adopción y venta de productos libres de maltrato animal.

Este festival es un paso significativo hacia un futuro donde los derechos de los seres sintientes sean respetados y valorados en nuestra sociedad. De esta manera se respalda la convicción de Pensar en Grande, que concuerda con la visión humanista de la presidenta Claudia Sheinbaum.