Expertos han informado que el impacto auditivo de la pirotecnia es cien veces mayor en los animales que en los humanos, estos artefactos de pólvora les genera estrés, temor, taquicardias, ansiedad o pánico, además de que puede causar alteraciones en la conducta por lo que pueden ser agresivos o hiperactivos. Incluso hay animales que han llegado a morir de formas despiadas mientras buscaban escapar de esto.

La Clínica de Pequeñas Especies de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) señala que la tensión provocada por esto en los animales puede llegar a tal grado de paralizarlos.

Por ello, el Congreso del estado de Puebla aprobó una iniciativa que busca reducir los daños provocados por el uso de pirotecnia en las personas y los animales.

Por unanimidad, los legisladores locales aprobaron las modificaciones a la Ley del Sistema Estatal de Protección Civil luego de que la iniciativa fuera dictaminada en las comisiones.

De acuerdo con la diputada Guadalupe Yamak, esta medida busca que se establezcan protocolos en el uso de pirotecnia que vayan orientados a la prevención de accidentes.

Pese a que la pirotecnia y lo ritual en México mantiene una profunda conexión que los mantiene ligados a la festividad, la legisladora refirió que es necesario, por ello plantearon la sustitución de la pirotecnia sonora por la pirotecnia lumínica la cual evitara que los estruendos de los cohetes que generan afectaciones para las personas y los seres sintientes no puedan dañar a mas personas.  

Cabe destacar que los compuestos químicos que liberan los cohetes también pueden generar irritación en los ojos o las vías respiratorias.

Además de que cada especie reacciona de diversas formas, por ejemplo, mientras los gatos buscan un lugar seguro para esconderse, los perros tratan de huir del lugar.

Finalmente, Guadalupe Yamak confió en que se tenga la correcta implementación de las reformas a la Ley de Protección Civil del Estado y con ello poder continuar con la tradición de los juegos artificiales sin afectar a las personas, animales ni al medio ambiente.